Lo primero que me inspiró para crear este post fue la naturaleza invasiva. Me fascina cómo hasta en un lugar de asfalto, hormingón, acero o hasta en el más inóspito acantilado, puede crecer vegetación.
En el agujero más oscuro, en la caída más temible, y en los lugares abandonados.
Los primeros colonizadores en la naturaleza son los líquenes, que deterioran la piedra. Más adelante crecerán pequeñas hierbas, que atraerán insectos. Los insectos traerán animales más grandes que se alimentan de ellos.
Después crecerán arbustos, que volverán a atraer insectos y más animales, y después los árboles. Está todo tan relacionado entre sí, que no inspirarse en ello sería como no verlo.
Pero si introducimos la naturaleza de manera controlada en nuestros espacios podemos obtener algo como esto:
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Fuente imágenes: Pinterest, guiaparadecorar
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